Los paisajes de Perú varían según estemos en cordillera,
costa o selva. Aquí la Cigarra comparte imágenes de dos de esas tres regiones. También, algunas imágenes de montañas en Bolivia que son realmente grandiosas!
Esas montañas!
Sos la mirada exhausta de inmensidad inagotable. Picos que
se elevan blancos, radiantes.
Rocas, mineral, plata, oro. Tierra quebrada abrupta. Verde,
rosada, grisácea, negra. Una tras otra, adelante y al costado.
Te nombro y el sentido se rebasa. Sos nube que te abraza
alta, sonrisa y mirada abrumada en tu grandeza. Camino serpenteante, canción de
quena y barro. Sonido de charango.
Sos la madre de la papa en las terrazas, rejunte de
piedritas por millones.
Sos el poblado que crece en tu faldeo, el pueblo que te
camina. Como el dibujo imperfecto de líneas irregulares y ondulantes.
Murallas eternas que se estiran al cielo aunque las raíces
las retenga al suelo.
Pantallas de luces y sombras, de vientos que se quiebran, se
esconden y surgen enredando polvo arremolinado y fresco.
Imágenes que no sacian, que son empacho de carcajada y pecho
hinchado.
Y así son, bellas cordilleras!!
La Mar!
En los pueblos de costa es bien bonito recorrer los sitios
en donde los pescadores despliegan toda su destreza a través de diversos
métodos. Y ni que hablar de disfrutar del producto de ese oficio: los pescados
de carne blanca o roja, los cangrejos y los frutos de mar que en sus variadas
formas hacen de la gastronomía costera un manjar imperdible!
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